0.5 Eternally hers

Aborrezco al destino.
Todos los vampiros anhelan más que el rico sabor de la sangre es su amada, pero me traicionan. Me quedo esperanzado y sin esperanza. Contra todos los intentos, mi corazón se ha envenenado contra mí. Mi creencia se ha ido. Se ha tejido una mentira durante demasiado tiempo y caí en la red como tantos otros antes que yo.
Debo aliviar el dolor del tiempo. Ya no añoraré más un cuento de hadas. Esta tortura llega a su fin. Para encontrar el amor, sigo la tradición. Una ceremonia a juego.
Y ella cambia todo lo que sé.
Ella detiene el dolor. El tiempo está congelado. Mi capacidad para respirar es robada y retenida en sus garras. Mi sangre canta por ella.
¿Cómo no es mi amada?
Ninguna otra tendrá mi corazón, pero la magia encuentra la manera de destruirlo. Una guerra me lo roba todo. Me quedo con mi hija recién nacida mientras caemos en la oscuridad. Nunca volveré a hacer el ridículo. En la vida. En la muerte. Escribo mi propio destino.
Mi amor, mi fe, mis elecciones...
Eternamente, son suyos.

121 años sin esperanza han enmudecido un alma. Salem, Massachusetts.
El hogar de la magia.
El infierno de los condenados.
El lugar donde descanso hasta el final de los tiempos.
Solo hay una forma de que me despierte del coma.
Mi amada debe encontrarme y alimentarme con su sangre antes de que me convierta en cenizas.
Es una rareza para un vampiro conocer a su compañera de sangre.
Sabía que cuando me llevara el coma, moriría.
En la oscuridad. Solo. Hasta que Maven Wildes compra mi propiedad.
Su presencia en la casa despierta mi espíritu.
Pero no mi mente.
La quiero fuera de mi casa más de lo que quiero respirar aire fresco.
Desafortunadamente, la hermosa mujer exasperante se niega a irse.
Sin embargo... conocerme revive una magia perdida en sus venas.
Y ahora respirarla es todo lo que quiero.
Nuestro amor crea el poder que anhela un brujo.
Derramaré sangre para tener a Maven, pero beberé la suya hasta que su corazón se detenga.
Siempre protegeré a mi amada con todo mi ser.
Aunque signifique pasar mis días en la noche eterna.